2009. Acumulas otro año, como si tal cosa, pero ya no te acuerdas de cómo eras. Ahora recuerdas quién eras, entonces.

¡OÑE!. Tarde desapacible, irritante. Los niños salen del cole. La lluvia sólo amenaza. Un chaval de nueve o diez años corretea alrededor de sus padres. A la tercera o cuarta vuelta casi tropieza con el padre, que brama:«¡Oñe, que te pego con el paraguas!»

Sigo manteniendo, como siempre poco, este diario del mantenido. Además he abierto el blog Gente de internet.

MARIO TASCÓN. En mi nuevo blog, Gente de internet: «No olvidemos que detrás de las herramientas, y de los algoritmos, también hay talento».

Me gusta cerrar los círculos, o cuadrarlos, qué sé yo: Mario fue mi jefe en elmundo.es durante unos meses; con él y parte del equipo que luego fichó por Prisacom (y con algunos que se quedaron) montamos una página de libros, elmundolibro.com, que vivió un lustro. La gente estaba bastante desconcertada cuando nos enteramos de la diáspora en la redacción de El Mundo, un lunes si no recuerdo mal. Andaba por la primera planta de Pradillo 42 cuando uno de mis jefes de papel me vio al final de un pasillo. Echó a correr y me abrazó: ¡No te has ido! Así me enteré.