[1] AEROFAGIA. ¿Seguro que estás bien?

[2] Barrio rojo. -Coincido en un 90%, porque me gusta mirar las pescaderías.

-También miro las agencias de viaje y ¡las pastelerías!

-Los escaparates de algunas librerías son peores que los de las casquerías (si las hubiere).

-Hace poco leí que "escaparate" es un neerlandismo. "En castellano no son muy abundantes: canica, amarrar, pólder, abra, etc..." (De wikipedia.org).

En http://makelele.wordpress.com/2006/09/19/escaparates-holandeses/ :

"Uno de los pocos neerlandismos del español es escaparate, que supongo que entró en España de la mano de los tercios del Capitán Alatriste y sus conmilitones. Como bien explica el Corominas:

ESCAPARATE, 1616. Del neerlandés anticuado schaparade (pronúnciese sjáprade, con j castellana) “armario (especialmente el de cocina”), cpt. de schapp “estante, armario”, y una forma frisona correspondiente al neerlandés reeden “preparar”.

En los Países Bajos el arte del escaparatismo está muy desarrollado. Y no me refiero a los escaparates del Barrio Rojo de Amsterdam (más bien cutrecillos) ni a los de la Kalverstraat de Utrecht, calle por la que suelo pasar camino del supermercado. Me refiero a los escaparates de las tiendas, que, en su mayoría, son un prodigio de creatividad y buen gusto".

[3] Mar y montaña. Lo máximo son las tiendas de artículos de pesca con cuadros de nudos y amplia gama de carretes, y los escaparates de las tiendas de montaña con crampones a la vista.

[4] Ugarte informa. No entiendo todo este rollo que te traes. Nabokov decía que nada hay más apasionante que cazar mariposas. Pero se equivocaba: nada hay más apasionante que mirar el escaparate de una pescadería. La vida, de hecho, es como una enorme pescadería. Y la pescadería, en cuanto tal, una metáfora.
Un saludo,

[5] Pajarería. Me detengo en en el escaparate de la pajarería de Barakaldo y observo al hamster corretear como un éstúpido en su ruedita.

- ¿A dónde vas, pequeño inépto?

Espero un rato con la nariz pegada al cristal, hasta que se detiene, exhausto, para decirme:

- Manzanas traigo, gordinflón.

[6] Fruterías. Yo desde esta tribuna rompo una lanza por los escaparates de las fruterías, que, si están bien puestos, son punto y aparte. ¿Hay cosa más bonita y colorida que la fruta y la verdura? Y encima es sana y apetitosa. Miradlos, miradlos, igual os anima a comprar ¡que coméis poco verde, seguro!

[7] También pajarerías. Como J, de pequeño las pajarerías eran mi debilidad. Aunque ahora me dan pena los animalicos, sobre todo los cachorros, ahí, encerrados en una pecera. Antes no había tantas pet shops: el único sitio decente para ver bichos era El Corte Inglés (lo siento, Peter). Ahora no hay centro comercial que se precie sin una tienda de animales, además de la bolera. De pequeño también me encantaba acompañar a mi madre al puesto del mercado donde estaba el charcutero: ver cortar la carne es un espectáculo, brutal, sí, pero delicioso.

[8] Y que me dicen de los maniquies humanos tras el cristal.
Pero el mejor es el escaparate de una funeraria, sin miedo al alunizaje.

[9] A mí no me gustan los escaparates cubiertos de papel de estraza en los que dice: cerrado por reforma.

[10] Siempre te quedará la fruta. En esa lista no veo ni fruterías ni verdulerías, mi más sincera enhorabuena